Nivel 2 oración Archivos

Bolsa de oración

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Si tienes preocupaciones o problemas, mételos en tu bolsa de la oración y deja que Dios la cargue. A veces, olvidamos que a Dios le gusta que le entreguemos nuestras preocupaciones y problemas a Él en oración y permitamos que los lleve por nosotros, que intercambiemos nuestras preocupaciones por Su paz y fortaleza.

Y si conoces a alguien que también está pasando por momentos difíciles, quizás eso te preocupa también. Así que añádelo a tu bolsa de la oración y pídele a Dios que les asista. ¡Eso marcará una gran diferencia para ellos!

Versículos de la Biblia:

Dios es quien me ciñe de poder, y quien hace perfecto mi camino1.

Porque no nos ha dado Dios espíritu de cobardía, sino de poder, de amor y de dominio propio2.


Notas a pie de página:

1 Salmo 18:32 (RV)

2 2 Timoteo 1:7 (RV)

Texto: Nia Russell. Ilustración: Mya. Diseño: Roy Evans.
Publicado por Rincón de las maravillas. © La Familia Internacional, 2018.

Reflexión del día: Un estilo de vida

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La Biblia dice:

Orad sin cesar (1 Tesalonicenses 5:17; RV).

Piensa:

¿Qué significa «orad sin cesar»? ¿Significa que cada palabra que digamos debe ser una oración? Eso sería bastante complicado. «Orad sin cesar» significa que debes recordar orar. No quiere decir que tienes que hablar continuamente en oración; sino más bien que la oración sea un estilo de vida, que la oración forme parte de tu actitud. Cuando deseas o quieres algo, oras. Cuando estás preocupado por algo, oras. Cuando vives algo que te hace feliz, ¡dedicas unos instantes a darle gracias a Dios por ello! Tus oraciones y alabanzas son una forma de tener presente a Dios durante el día.

Texto: Jackie Owens. Ilustración: Sandra Reign. Diseño: Roy Evans.
Publicado por Rincón de las maravillas. © La Familia Internacional, 2018.

Como en el Cielo

MP3: As It Is in Heaven (English)

Mateo 6:9-13

Padre nuestro que estás en los cielos,
santificado sea tu nombre.
Venga tu reino.
Hágase tu voluntad,
como en el cielo, así también en la tierra.

El pan nuestro de cada día, dánoslo hoy.
Y perdónanos nuestras deudas,
como también nosotros perdonamos a nuestros deudores.
Venga tu reino.
Hágase tu voluntad,
como en el cielo, así también en la tierra.

Y no nos metas en tentación,
mas líbranos del mal.
Porque tuyo es el reino, y el poder,
y la gloria, por todos los siglos. Amén.

Música: Eddie Cochran. Voz: Jeremy Spencer.
© La Familia Internacional, 2015