Nota al padre o profesor: El siguiente es un plan de clase de 20 a 30 minutos de duración que resalta el siguiente objetivo: «Comprender que la humildad es una actitud mental que debería gobernar nuestros actos, y por qué es así». (Desarrollo personal: Virtudes: Humildad-2c)
Leer: «Los beneficios de la humildad».
Debatir sobre los beneficios de la humildad, la mansedumbre y la benignidad en la interacción que uno tiene con los demás en contraposición con el tipo de reacciones que otros tienen hacia uno cuando actuamos de manera altanera y orgullosa.
Leer «Las amistades se refuerzan con la humildad».
Pídele a tu hijo o hija que piense en alguna situación en la que tenga que elegir entre reaccionar de forma humilde o altanera.
Memorizar 1 Pedro 5:5. «Y todos sírvanse unos a otros con humildad, porque “Dios se opone a los orgullosos pero muestra su favor a los humildes”.» (NVI)
Leer «La humildad de Jesús».
Leer «Lecturas energizantes nº11: Fruto del Espíritu: Benignidad y mansedumbre». Realizar la acción mencionada en la última página de este artículo.
Debatir sobre cómo la benignidad y la mansedumbre son algunos de los «frutos del espíritu» que se mencionan en Gálatas 5:22-23. Cuando pasamos ratos con Dios al leer Su Palabra y en oración, obtendremos una mayor medida de esos frutos en nuestra vida porque, cuanto más estudiemos Su Palabra, más sabremos cómo desea Dios que nos comportemos con los demás.
Leer «El sombrero morado». Que los niños traten de contar la historia con los cuatro consejeros procurando trabajar juntos para resolver el problema con una actitud humilde y considerada, en vez de discutir sobre quién tenía razón.
Compilado por el equipo de Rincón de las maravillas. Traducción: Adriana Vera y Antonia López.© La Familia Internacional, 2012