Nota para los padres y profesores: El siguiente es un plan de clase de 20 a 30 minutos de duración que tiene como objetivo buscar maneras de llevar a la práctica la perseverancia: aprender a terminar lo que se empieza, a pedir ayuda cuando se necesita y a persistir a pesar de las dificultades. (Desarrollo personal: Conducta personal: Perseverancia-1c)

Leer «Fijarse metas».

Conversar sobre el niño de las páginas 10 y 12, que se mostraba reacio a memorizar un poema para el colegio porque pensaba que era muy difícil, pero que, gracias a que su papá lo animó a hacerlo poco a poco, el niño pudo lograr la meta. Hablen de lo que podría haber pasado si el niño hubiese esperado para empezar a memorizar su poema apenas una o dos noches antes de la fecha en que debía recitarlo en el colegio.

Preguntarle al niño qué piensa que habría sucedido si la niña que debía completar el informe de un libro (páginas 10 y 12) hubiera esperado para leer el libro hasta un día o dos antes de la fecha de entrega de dicho informe. ¿Qué clase de resultado hubiera obtenido ella?

Animar a los niños a hablar sobre distintas maneras de relacionar esta lección con sus estudios académicos.

Leer y hablar sobre Lucas 14:28–30: Explicar a los niños cómo utilizó Jesús esta anécdota para animar a los que deseaban seguirlo como discípulos a asegurarse de que servirlo a Él era realmente lo que querían y no terminar abandonando a mitad de camino.

Hablar de que esto se aplica de igual manera para cualquier meta en la vida. Cuando nos proponemos alcanzar un objetivo, el primer paso es determinar cuál es el objetivo que queremos alcanzar y los pasos necesarios para lograrlo. Debemos, entonces, decidir si estamos dispuestos a hacer lo que sea necesario para alcanzar esa meta.

Por ejemplo, si la niña que estaba ahorrando para conseguir una pecera con peces hubiera pensado: «Quiero una pecera con lindos peces, y quiero ir ahora mismo a comprarla. No quiero tener que preparar cada cosita en el tanque antes de colocar los peces», entonces no habría logrado cumplir su cometido.

Leer «Exposición de oficios y habilidades».

Contarles a los niños qué talentos adquirieron ustedes en su vida, y cómo los ayudó a sentirse realizados en determinados aspectos de su vida. Hablen sobre otras nuevas habilidades que están tratando de adquirir ahora.

Debatir con los niños sobre cómo cada niño en el cuento tuvo que enfrentar un desafío, o cómo aprendieron otras enseñanzas importantes al procurar adquirir un nuevo talento. Por ejemplo, Manchi tuvo que aprender a ser diligente prestando atención al profesor de manejo (conducción); Nansel quiso abandonar después de su primera creación de bordado; Tinchi debía prestar más atención a sus otros estudios, y no concentrarse únicamente en perfeccionar su talento jugando al rapibol; y Merchi aprendió que si bien debía esforzarse al máximo, no tenía que ser mejor que los demás para hallar satisfacción en su trabajo.

Proponte una meta: Imprimir y llenar el cuadro que se muestra al final de la historia «Fijarse metas» (página 15 ó 16, según el que más les guste: si el que está en color o el blanco y negro para que los niños coloreen). Si el niño está tratando de alcanzar más de una meta, pueden imprimir una copia por cada meta.

¡Celebra! Planea la manera de celebrar cuando se logre el objetivo. Si tu hijo está tratando de alcanzar una meta, tal como conseguir y armar una pecera, la celebración, entonces, podría estar directamente relacionada con el logro de esa meta y salir a comprar los peces para la pecera. Pero si el niño se propone como meta dejar de morderse las uñas, entonces sería apropiada una celebración que no estuviera relacionada con eso para alentarlo a persistir.

Tal vez quieran escribir, en la parte inferior del cuadro, un plan de celebración una vez que el niño logre el objetivo.

Para ciertas metas, puede que ayude también celebrar cada paso alcanzado, tal como en el ejemplo del niño que procura dejar de morderse las uñas. En ese caso, la primera meta podría ser pasar todo un día sin haberse mordido las uñas, luego toda una semana, luego un mes, dos, etc. En ese caso, tal vez sirva de ayuda hacer pequeñas celebraciones para cada paso logrado, y luego una gran celebración una vez alcanzada la meta final.

Memoriza: Salmo 37:5. Ayuden a los niños a escribir este versículo de memorización en una tarjetita para pegarla junto al cuadro de «Metas», para que se animen al saber que Dios los está ayudando a lograr sus cometidos.

No olviden alabar al Señor por toda la ayuda que nos da para que logremos los objetivos. (Leer el Salmo 150 para conseguir ideas para alabar al Señor por Su ayuda.)

Material adicional para niños mayores sobre lograr las metas:

• Pequeñas metas
• Plan: Que los sueños se hagan realidad