Todo el mundo, en ocasiones, tiene malentendidos con otra persona o se mete en discusiones o desacuerdos. Es muy fácil comenzar un episodio así, pero cuesta un poco terminarlo. Por lo general, ambas partes creen tener la razón, les cuesta admitir que están equivocados o tratar de resolver el asunto de manera que todos queden contentos.
Aunque resulte complicado, la próxima vez que tengas un desacuerdo con alguien —ya sea un amigo, un compañero de clase, tu hermanito o tus padres— ten en cuenta los siguientes consejos:
La Biblia da numerosos consejos muy buenos a los que riñen o discuten fácilmente con otras personas. Efesios 4:29, 31-32 dice: «Ninguna palabra corrompida salga de vuestra boca, sino la que sea buena para la necesaria edificación... Quítense de vosotros toda amargura, enojo, ira… y maledicencia..., y sed benignos unos con otros, misericordiosos, perdonándoos unos a otros»1.
Dedica tiempo para ver qué dice la Biblia sobre discutir, y pídele a Jesús que te ayude a tener más paciencia, comprensión y amor por los demás.
La otra persona quizás no haga que resulte fácil terminar un desacuerdo o discusión, pero tú puedes hacer tu parte para ser «benigno, misericordioso y perdonador», recordando que «la blanda respuesta quita la ira»2.
Notas a pie de página
1 RV
2 Proverbios 15:1 (RV)
Texto: Nia Russell. Ilustración: Disier Martin. Diseño: Roy Evans.Publicado por Rincón de las maravillas. © La Familia Internacional, 2018.