A veces, puedes sentir que los desafíos que enfrentas —ya sean tus desacuerdos con otras personas, la cantidad de tareas o trabajos que debes realizar, las exigencias que enfrentas en el colegio, o incluso esa tristeza que te sacude sin razón aparente— son como un muro impenetrable que te bloquea el camino. Parece que todos tus esfuerzos por salir del bajón sean en vano.
No permitas que esa sensación de desaliento te embargue. Puedes hacerlo creyendo que las promesas de Dios te ayudarán en medio de las dificultades. Tu actitud positiva logrará que ese muro de resistencia se desmorone, ¡y volverás a sentirte feliz, contento y lleno de esperanza de nuevo!
«Sean valientes y no se desanimen, porque sus trabajos tendrán una recompensa» (2Crónicas 15:7, DHH).
Texto: Jackie Owens. Ilustración y diseño: Stefan Merour.Publicado por Rincón de las maravillas. © La Familia Internacional, 2017