Significado del nombre: «Consolado por el Señor»

Sabías que: Nehemías era el copero del rey Artajerjes de Persia. En la antigüedad, los coperos ocupaban un alto rango en la corte del rey y eran oficiales de gran confianza. Para contrarrestar las intrigas palaciegas, con frecuencia el copero debía probar de antemano todos los vinos y alimentos que se sirvieran al rey para verificar que no estuvieran envenenados. Nehemías gozaba de una excelente reputación en la corte del rey y Artajerjes se ofreció a darle todo lo que necesitara para reconstruir los muros de Jerusalén.

Datos asombrosos: A Nehemías le tomó 52 días reconstruir los muros de Jerusalén, pero no lo hizo él solo. Obreros especializados y todo tipo de personas judías (desde perfumeros, pastores e incluso sacerdotes), colaboraron echando una mano. En el capítulo tercero del libro de Nehemías encontrarás los nombres de todos los que trabajaron en la restauración de los muros de Jerusalén.

Rasgo fenomenal: Nehemías estaba muy angustiado por el estado en que se encontraba la ciudad de sus antepasados, ¡y no se desentendió del asunto! Todo lo contrario: ideó un plan y lo puso en acción. No permitió que nada le detuviera para llevar a cabo la importante misión que Dios le había encomendado. A pesar de las burlas y amenazas de que fue objeto, siguió adelante con su obra: con una mano dirigiendo a los obreros y con la otra sosteniendo una espada.

Tú también puedes: Llevar a cabo lo que Dios te indique.