La Biblia dice:
Dios es nuestro amparo y fortaleza, nuestro pronto auxilio en las tribulaciones (Salmo 46:1; RV).
Piensa:
¿Tienes preocupaciones o temores? Refúgiate en Dios. Cuando te agobien los problemas, concéntrate en las promesas que Dios te ha hecho y busca Su fortaleza orando y alabándolo. A medida que pasas tiempo con Él, descubrirás que Su presencia entra en tu corazón. Cuando le alabas, notarás que se desvanecen los sentimientos negativos y recuperas la paz y el gozo.
Texto: Jackie Owens. Ilustración: Sandra Reign. Diseño: Roy Evans.Publicado por Rincón de las maravillas. © La Familia Internacional, 2018.