Todos nos lastimamos alguna vez. A nadie le gusta lastimarse, pero hice que tu cuerpo se cure a sí mismo y se recupere de los golpes, rasguños y cortes. Cuando nos lastimamos, es importante pensar por qué nos ocurrió. ¿Estabas teniendo cuidado? ¿Estabas escuchando y obedeciendo lo que te decían tus padres o maestros? A veces te lastimas por un descuido, y es importante aprender de los errores para no tener más accidentes a causa de esos descuidos.
Los golpecitos y los rasguños nos recuerdan que debemos ir más despacio y ser más cuidadosos. Cuando salgas a jugar, observa y reza. Piensa antes de brincar o de saltar algún obstáculo. Presta atención a lo que haces para evitar que ocurran accidentes. Cuanto más cuidado tengas, más evitarás los accidentes.
Ve despacio, ten cuidado y no te olvides de escuchar a los que te cuidan. ¡Yo también estaré presente para cuidarte!
Texto: Lyra Anouk. Ilustración: Agnes Lemaire. Color: Doug Calder. Diseño: Roy Evans.Ilustración copyright © Aurora Production, 2004.Publicado por Rincón de las maravillas. © La Familia Internacional, 2022.